El dolor viene como una experiencia inherente a la vida. El sufrimiento es una reacción al dolor que proviene de la impotencia de poner un alto al dolor.
El dolor es inevitable, el sufrimiento no.
Siempre hay algo que podemos hacer para cambiar ese dolor, esa pena que nos agobia, aunque sea en medidas pequeñas. Centrarse en el cambio puede ser útil, puesto que el sufrimiento a veces produce la fantasía de que ese dolor no va a terminar nunca.
Gran parte de este sufrimiento, se genera muchas veces en nuestro modelo mental de lo que creemos que "deberia de ser" y nos quedamos atorados en esta idea, dandole vueltas una y otra vez, en un desgaste inútil; porque mira, la verdad es que las cosas son como son, las personas son como son y a veces inutilmente sufrimos porque el otro no es o ya no es, o ya no quiere volver a ser el que espero en mi mente que sea.
Es importante que percibas que no eres impotente de cambiar tu sufrimiento. Tu puedes decidir algo diferente, puedes elegir otra cosa, otra forma de vida, otra persona, otra relacion. Y si no quieres, entonces puedes elegir simplemente no seguir sufriendo indefinidamente por esa situacion que no es como en tu mente quisieras que fuera. Puedes comenzar a ver, poco a poco, que sí tienes opciones, que sí puedes elegir y que aunque duela por ahora, eso tambien pasará.
Hoy recordaré que aunque el dolor sea inevitable, el sufrimiento es opcional, y aunque el dolor sea inmenso, ese tambien pasara.
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